Por Padre Manuel Solorzano Guest Column Noviembre 24, 2024 Solemnidad de Jesucristo Rey del Universo Juan 18: 33-37
Queridos hermanos: Con la Solemnidad de Cristo Rey, la Iglesia celebra el señorío de Jesucristo sobre toda la creación. Esta fiesta marca el final del año litúrgico y nos invita a reflexionar sobre el Reino de Dios que se manifiesta a través de la vida, muerte y resurrección de Cristo. Las lecturas de este día nos ofrecen una visión profunda del reinado de Cristo, no como un rey terrestre con poder militar o político, sino como el Rey que entrega su vida por amor a su pueblo.
El profeta Daniel nos presenta la visión de “un Hijo de hombre” que recibe de Dios “dominio, gloria y reino”, un reino eterno que no será destruido. Este pasaje nos recuerda que Cristo, como Rey, es el cumplimiento de esta profecía. Jesús no es solo un rey humano, sino que su reinado trasciende el tiempo y el espacio. Su dominio es eterno, y todos los pueblos lo servirán. Este es un reino de justicia, paz y amor, donde no hay lugar para la opresión ni la violencia.
El libro del Apocalipsis nos ofrece una visión de Cristo como “el Príncipe de los reyes de la tierra” y “el Alfa y la Omega”. Esta lectura enfatiza la soberanía universal de Cristo, quien ha vencido la muerte y nos ha hecho “un reino de sacerdotes para Dios”. En su resurrección, Cristo muestra su poder definitivo sobre todo lo que amenaza la vida y la dignidad humana. Este texto también nos invita a esperar con esperanza su segunda venida, cuando su reinado se manifestará en plenitud.
El evangelio nos presenta a Jesús en diálogo con Pilato. Ante la pregunta directa de Pilato, “¿Eres tú el rey de los judíos?”,Jesús responde que su reino “no es de este mundo”. Esta afirmación de Jesús nos lleva a comprender que su reinado no se basa en los criterios de poder y control humanos, sino en la verdad, el servicio y el amor. Cristo es el Rey que no impone su autoridad, sino que ofrece su vida para salvarnos. Su reino se manifiesta en la entrega total y en el amor hacia los demás.
Las lecturas de hoy nos presentan una imagen clara de lo que significa el reinado de Cristo. No se trata de un reino de poder y dominación, sino de servicio, justicia y verdad. Cristo reina desde la cruz, ofreciendo su vida por los demás, y nos invita a ser parte de su reino viviendo con el mismo espíritu de servicio y amor. En el evangelio, Jesús deja claro que su reino no es de este mundo. Esto no significa que sea un reino distante o desconectado de la realidad, sino que los valores que rigen el reino de Dios son diferentes de los del mundo. Mientras que los reinos humanos buscan poder, control y riqueza, el reino de Cristo se construye sobre la justicia, la paz y el amor.
Por tanto, Celebrar a Cristo como Rey nos recuerda que estamos llamados a vivir bajo su reinado aquí y ahora. Esto implica ser testigos de la verdad, trabajar por la justicia y mostrar compasión hacia los más necesitados. Cristo nos invita a construir su reino en este mundo, transformando nuestras relaciones y comunidades con su amor.
¿Cómo puedo vivir hoy bajo el reinado de Cristo? ¿Qué aspectos de mi vida necesitan ser transformados por su amor y justicia? ¿De qué manera puedo ser testigo del reino de Cristo en mi familia, trabajo o comunidad? ¿Cómo puedo contribuir a la construcción del reino de Dios promoviendo la paz, la justicia y la verdad en mi entorno?
Que la celebración de esta solemnidad nos ayude a renovar nuestro compromiso con Cristo, reconociendo su reinado en nuestras vidas y esforzándonos por vivir según los valores de su reino. Que Cristo, nuestro Rey, reine en nuestros corazones y nos guíe a vivir cada día como auténticos discípulos suyos.